Una gata en la piscina

Hace unos días nos fuimos con Nova (y la abuela Eudo + la tía Anaís) a Puerto del Mar en la vía de Tacarigua de La Laguna... La gata, como es habitual, se adaptó sin problema al nuevo ambiente, aunque el calor playero la mantenía acelerada y jadeante... Allí, Nova experimentó placer en el patio del apartamento (piso 1) y hasta se escapó por los alrededores del edificio... En el segundo día, Nova parrandeó por la grama y los alrededores de la piscina del conjunto... Tanto le gustó la aventura de piscina (y cuasi playa) que el día del retorno se esfumó y tuvimos que seguirla por jardines y matas, hasta que por fin decidió venirse a Caracas, ciudad en la cual ella maulla sus plegarias para que aparezca el Cat Chow que lleva más de un mes desaparecido de los supermercados...